Deseo contar mi experiencia con el balón gástrico, esperando que pueda ser de utilidad a todas aquellas personas que están pensando realizarse el procedimiento como ayuda para solucionar los problemas de sobrepeso u obesidad.
Tengo 31 años y mi recomendación es que antes que de dar este paso debes estar 100% convencido de lo que harás, el balón por si solo no hace milagros simplemente será tu gran aliado en un proceso de cambio que iniciaras.
Inicio del proceso: Una vez tomé la decisión luego de asistir a la valoración con el doctor Héctor Vargas, la comuniqué a mi familia (esposa, padres, hermano), les expliqué el proceso y a pesar que en principio hubo algo de resistencia más por desconocimiento del mismo, finalmente lo comprendieron y me brindaron todo su apoyo en el mismo.
El día 4 de Marzo de 2015 y pesando 98.8 kilogramos me colocaron el balón, un procedimiento sencillo e indoloro, al poco tiempo y con todas las recomendaciones que me impartieron llegue a casa, con la tranquilidad de que el equipo médico estaría en permanente contacto conmigo.
Primera semana: Ninguno de los síntomas que experimenté durante este tiempo fueron desconocidos, toda vez que previamente me dieron a conocer todo lo que podía sentir en estos días, lo que ayudó en buena forma a controlar la ansiedad, en mi caso particular fue mucha sed, náuseas, malestar abdominal, sensación permanente de llenura, retorcijones, síntomas que fueron pasando con los días al punto de llegar a no sentir nada.
Durante los primeros tres días tuve una alimentación líquida y en mínimas cantidades, para luego pasar a una alimentación blanda. Fue una semana difícil pero al final estoy convencido que valió la pena el esfuerzo.
Primer mes: En lo personal ya no manejaba ansiedad puesto que ya había tenido contacto con la mayoría de los profesionales del equipo, quienes me brindaron una excelente motivación en aras de lograr las metas trazadas, este fue un mes de adaptación a todos los cambios que debía ir dando, los cuales deben perdurar no solo mientras se tiene el balón sino también después de la extracción del mismo, me sentía cada día mas motivado en la medida que veía los resultados. Tranquilo es normal que te subas a la báscula dos y tres veces al día, no creo que sea el único que pase por eso.
Durante este primer mes inicié además a realizar una rutina de ejercicios para lo cual recibí instrucciones del médico deportólogo, a esto le coloqué mucho empeño y disciplina, considerándolo determinante en la obtención de mejores resultados, mantener una rutina de ejercicio y una buena alimentación después del balón, será mi mayor garantía para que los resultados obtenidos perduren en el tiempo.
Segundo mes: Continué avanzando en el proceso, los resultados ya saltan a la vista, las personas de mi círculo social empezaron hacer preguntas y bueno ya es el manejo que le quieras dar, en mi caso particular la respuesta fue que estaba haciendo dieta lo cual es cierto, sólo que no les conté que tenía ayuda extra.
Durante este mes se me presentaron situaciones como invitaciones a reuniones sociales y cosas por el estilo donde lo que más había eran cosas que no podía consumir acorde a las recomendaciones de la nutricionista, son situaciones que debes saber sortear sin dudar, nunca dejé de asistir dado que tenía claro que mis amistades en poco tiempo también se acostumbrarían a los cambios que estaba dando, cosa que finalmente sucedió.
La idea no era encerrarme sino cambiar mi estilo de vida, identifiqué restaurantes que podía tener alimentos sanos y allí era donde normalmente acudía, no es por hacer publicidad sino a manera de recomendación el restaurante IL FORNO me daba la opción en la carta de armar mi plato como lo deseara, los restaurantes que brinden esta opción se constituyen en buenos aliados para no dejar de hacer planes como salir a cenar.
La alimentación en esta etapa es normal pero con porciones controladas, nunca sentí hambre ya que haces tus tres comidas diarias, la media mañana y la media tarde.
La motivación sigue siendo alta, continúo viendo cambios, inicias a tener que adecuar tu vestuario, te recomiendo que a pesar de estar muy tentado a comprar ropa NO LO HAGAS debido a que perderás el dinero en muy poco tiempo, te recomiendo que acudas a un sastre con algunas prendas y las adecúes, tampoco recomiendo que inviertas mucho dinero aquí ya que irás perdiendo tallas rápidamente.
Te continuarás viendo con todos los integrantes del equipo profesional quienes son un gran apoyo y motivación.
Tercer mes: A este mes entré con mi meta de pérdida de peso casi cumplida, tenía previsto perder 20 kilos, ya que quedaba dentro de un rango de peso adecuado y lo más importante de todo era que había hecho conciencia de los cambios que había dado en mis hábitos alimenticios y que nuevamente le había tomado gusto a una rutina diaria de ejercicios.
Finalmente cumplidos los tres meses de este proceso me retiré el balón, actualmente peso 77 kilos, continúo asistiendo a los controles con los profesionales, pasados 45 días aproximadamente desde que me retiré el balón me mantengo en mi rango de peso, continúo con mi rutina de ejercicios, eliminé los azúcares en un 95% y mantengo una alimentación saludable pero normal. Eventualmente doy rienda suelta a algún antojo sin embargo tengo claro que no puede ser algo de todos los días.
Si tu principal temor es recuperar el peso después de quitar el balón gástrico, mi respuesta es que esto sólo depende de cada uno y de que logres mantener los buenos hábitos en el tiempo ya que de lo contrario obviamente recuperarás el peso.
Finalmente quiero agradecer el apoyo y acompañamiento de todo el equipo de profesiones en cabeza del doctor Héctor Vargas, puesto que han hecho de este proceso algo exitoso y mucho más fácil.
Paciente
Balon Gastrico
*El testimonio ofrecido es una experiencia personal de quien lo escribe. Los resultados pueden variar de paciente a paciente